Condor, la aerolínea turística que perteneció al grupo Thomas Cook, se salvó finalmente. Una empresa con sede en Londres, Attestor Capital, adquirió el 51 por ciento de las acciones, por 450 millones de euros.
De ese monto, 250 millones se destinarán a una nueva flota de aviones de largo radio. Los 4.050 puestos de trabajo de la empresa se salvarán también del despido.
Tanto el Gobierno de Alemania como el del estado de Hesse, donde tiene la sede, dijeron que renuncian a 150 millones de euros del crédito que le dieron a la compañía en el peor momento de la crisis. Los otros 400 millones deberán devolverlos.
Condor estaba en desgracia antes de la crisis del coronavirus cuando el grupo Thomas Cook, al que pertenecía, cerró y la aerolínea quedó en una situación incierta. Nunca dejó de ganar dinero, pero no pudo evitar la caída derivada del cierre de su matriz.
Mas adelante fue comprada por Lot, la aerolínea nacional de Polonia. Sin embargo, la operación que se presentó en febrero de 2020, cayó inmediatamente porque el coronavirus dejó a Lot contra las cuerdas, de manera que poco tiempo después renunció a la compra.
El Gobierno alemán la ayudó a la espera de tiempos mejores, que parecen llegar ahora. En medio de la crisis del coronavirus, la aerolínea encontró un nuevo propietario mayoritario. La empresa de gestión de activos con sede en Londres Attestor Capital asumirá el 51 por ciento de las acciones -el resto sigue en manos del banco Kreditanstalt für Wiederaufbau (KfW)- e invertirá fuertemente en la empresa.
